Al final de cuentas, le salió barato al gobierno del estado y al municipio de Boca del Río, la realización del Primer Festival Internacional de la Salsa 2011, ya que pudo convertirse en una muy lamentable tragedia, de haberse registrado en las proximidades del “salsodromo”, el enfrentamiento entre presuntos sicarios y el ejército, en donde cinco de ellos perdieron la vida, entre ellos Rolando Veytia Bravo, alias "El Manitas", quien según fuentes de inteligencia es considerado el jefe de las plazas de Veracruz, Boca del Río, Medellín y La Antigua.
Era de esperarse que ocurriera un enfrentamiento, entre la delincuencia organizada que opera en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río y las fuerzas federales –ejército y marina- que se encargan de vigilar el orden.
Como no se pactó una tregua, al menos durante el fin de semana en que se realizaba el festival internacional de salsa en Boca del Río, con la presentación de los más afamados grupos de salsa, lógico era de prever que los delincuentes no se iban a quedar guardados en sus casas, sino que también iban a salir y que más tarde que temprano terminarían encontrándose con las fuerzas federales como ocurrió.
Afortunadamente el enfrentamiento ocurrió sobre el Boulevard Adolfo Ruiz Cortines a la altura del Fraccionamiento Costa Verde en el municipio de Boca del Río, porque de haberse registrado más cerca de donde se encontraban reunidos según los organizadores 120 gentes, no podemos imaginar cómo iban a detener una estampida de la multitud a la hora que empezaran a sonar los balazos.
La multitud se encontraba aglomerada, esperando de pie desde las seis de la tarde, hasta pasadas las tres de la mañana en que terminaron algunos de los conciertos, pero hay que insistir en que tuvieron suerte los organizadores, de que el enfrentamiento fuera por otros rumbos, porque en esas condiciones de seguridad y protección civil, el saldo pudo haber sido catastrófico.
Lo que se organizó como un acto artístico-político, en donde todos los cantantes agradecieron al alcalde de Boca del Río Salvador Manzur la “invitación” como si lo hubieran hecho de a gratis y no cobrando miles de dólares y como si el presidente municipal no hubiera tenido los apoyos de otras autoridades como el gobernador Javier Duarte de Ochoa, a quien ni siquiera mencionaron.
Los ganones fueron los vendedores de cervezas y refrescos, ya que mínimo los asistentes que esperaron varias horas, tuvieron que consumir uno o dos embases, de a 20 y 25 pesos, por 120 mil asistentes, un buen negocito de fin de semana.
Comentarios
Publicar un comentario