Todavía la mañana de este lunes, la secretaria de protección civil del gobierno del estado de Veracruz, Nohemí Guzmán Lagunes entrevistada por Tonatiu Pola en Telever, declaró que “hasta el momento solo se tienen reportes de un muerto” respecto de la explosión de seis tanques que contenían un millón 200 mil litros de etanol de la Planta Alcoholera Monterrosa, ubicada en el kilómetro 273 de la autopista Veracruz–México, en el municipio de Orizaba, registrada la mañana del pasado sábado.
No es admisible, que casi tres días después de registrado el accidente, la titular de protección civil en el estado de Veracruz, salga a declarar a la opinión pública que solamente hubo un muerto.
Sin embargo, desde el mismo sábado las versiones periodísticas –no oficiales- hablaban de que la explosión dejó un saldo de cinco muertos y por lo menos cinco lesionados.
La encargada de protección civil en el estado, parece desconocer o peor aún, trata de ocultar que en la explosión fallecieron cuatro conductores de las pipas que esperaban cargar el químico, así como el vigilante de la planta, además resultaron lesionadas cinco personas, dos de ellas con quemaduras de primer grado en 12% de su cuerpo y una en 20%; el estado de las víctimas se reporta como estable; dos más sufrieron contusiones, ya que la onda expansiva los arrojó varios metros; de la otra persona lesionada no se proporcionaron informes.
No entendemos porqué ese afán de las autoridades de tratar de ocultar lo que es obvio y evidente, ni modos que en la planta solamente estuviera operando con un chofer de una pipa y nadie más estuviera en el lugar.
¿Porqué se trata de ocultar la verdad, en un gobierno que presume de ser transparente?
Si fueron uno o diez muertos, lamentablemente, hay que decirlo y no insultar a la inteligencia de los veracruzanos tratando de tapar el sol con un dedo.
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