Un caso muy especial, en este proceso electoral, es el de Tuxpan, en donde algunas familias muy adictas al poder han jugado sus piezas de manera muy especial.
En este municipio del norte de Veracruz, hay
varios casos que bien ejemplifican la búsqueda del poder para vivir de la nómina
y hacer negocios.
Ahí les van algunos ejemplos de los cuales nos
enteramos en una visita relámpago que hicimos por esa ciudad y puerto de los
bellos atardeceres.
Primer caso: el papá es candidato a alcalde por una fuerza
política y su hija, va como candidata a Síndica en otro bando.
Es el caso de Everardo Gustin Sánchez, que es
candidato Independiente, mientras su hija Michel, está incluida como candidata
a Síndica en la planilla de la Coalición PRI, PAN, PRD.
Segundo caso: María del Pilar Martínez Matesanz, candidata a
Regidora Segunda en la planilla de Morena, es la esposa de Javier Sánchez
Balderas, quien aspiraba a la alcaldía y, cuando no se vio favorecido con la
candidatura, emigró a los brazos de su socio Alberto Silva Ramos, candidato del
Verde Ecologista a la Alcaldía.
Tercer caso: Aquí llama mucho la atención el juego de Raúl Ruiz
Díaz, quien llegó a ser alcalde de Tuxpan, gracias al manipuleo que hizo Beto
Silva, para que Javier Duarte le diera la bendición.
En el 2013, cuando Silva solicitó licencia para
ocupar la Titularidad de Sedesol, dejó en su lugar a Bardomiano Priego, que era
Regidor, para concluir el periodo constitucional y, para la siguiente elección,
propuso a Ruíz Díaz, quien, había sido su Director del Rastro Municipal y que,
en un principio, protegió todo lo mal hecho por Silva, hasta que hubo un punto
de quiebre y tronaron amistad y sociedad que tenían, por esa razón, hoy, se ha convertido
en uno de los mejores activistas de Pepe Mancha, candidato a alcalde por la
alianza PRI, PAN, PRD.
Comentando con un distinguido tuxpeño, que hoy
radica en Xalapa y que está viendo la contienda a distancia, dice que en todo
esto, solo hay una conclusión: “Todos ellos juegan a “agarrar de tonto” al
ciudadano tuxpeño, porque no les interesa el pueblo, solo sus muy particulares intereses”
…. Ellos creen que la ciudadanía tuxpeña, no se da cuenta de sus oscuros
intereses, sin importarles las necesidades de la población… “Ellos, ven por sus
familias y por sus negocios, así se lleven “entre las patas” a quien sea,
porque, ninguno de los mencionados representa realmente alguna fuerza política
en Tuxpan, son solo puros farsantes”.
Finalmente, dice este huasteco xalapeño que, en
cierta ocasión, el exgobernador Fidel Herrera, dijo “políticamente no entiendo
a Tuxpan o a los tuxpeños”, en referencia a que desde esos tiempos, muchos de
estos actores ya eran, únicamente, personajes que solo buscaban lucrar con el
erario público y eran factor de división.
Para concluir con este apunte, bien valdría la
pena que los tuxpeños le preguntaran a Everardo Gustin si va a votar por él o
por la alianza para que su hija asegure un espacio en la próxima comuna…. O,
María del Pilar Martínez, si su voto será para ella o para el socio de su marido…Finalmente
hay que preguntar si no habrá una nueva traición de parte de Raúl Ruiz, ahora, a
sus nuevos amigos panistas de Tuxpan, que pretenden consumar el proyecto de la
herencia familiar en la presidencia municipal, siguiendo el ejemplo de los
azules del estero, que aspiran a mantener el control en la zona conurbada
Veracruz-Boca del Río.
Al tiempo, que ya falta poco.
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